
Nunca acierto el peso ideal.
Por otra parte, mucha gente dice: ¿el tamaño?, sí que importa.
Yo decía: tanto el tamaño como el peso..., ¡no importan!
Después de 40 años y PICO existiendo en esta vida, pues ahora tengo que reconocerlo: Sí, importan tanto el tamaño como el peso...
Mi vecina-madre María me ha reñido: Mihoko! No debes poner tanta ropa en una colada!!!
Por fin he acudido a su casa: ¡María! ¿Tienes la lavadora libre??? ¡Tengo la ropa acumulada para lavar y no me funciona el centrifugado de la lavadora!
María me dice: hay lavadoras sencillas y económicas. Si no te funciona, es la hora de cambiarla.
Por fin he descubierto que mi lavadora no soporta tanto peso... Sospecho que por esta razón no centrifugaba...
Le digo: pero... sí que el tamaño importa, pues no tengo sitio para poner una lavadora de apertura frontal como tienes tú, pues es muy grande...
María: ¡Ah! Tendrá que ser la apertura superior... Entonces, te saldrá más cara.
Así que me conformo con el tamaño junior y el precio senior... Así es la vida... ¡Lo importante es la calidad!!!
De todos modos, dentro de 2 días, probaré otra colada con menos ropa a ver si funciona mi lavadora o no...
Gracias, María! Pues, me ha hecho 2 lavadoras: ropa oscura y la blanca... Si hubiera funcionado mi lavadora... lo hubiera hecho en una lavada... Desastre... Desastre... Desastre... No sirvo para estas cosas...
1 comentario:
qué suerte... yo ahora no tengo lavadora, aquí mucha gente no tiene, los pisos son antiguos, y hay que ir a la lavandería, como en las pelis. Pero a mi no me pasa lo que en las pelis.
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